¿Por qué un pensamiento, algo inmaterial, provoca efectos físicos en el cuerpo: ponerse colorado, tener una erección?
(EL PAÍS ) 19/9/2007
¿Qué es lo que impide a un empleado que ha discutido con su jefe levantarse y cogerle por el cuello. Según explica Eduardo Punset a propósito de la distinción entre pensar hacer una cosa y hacerla, el córtex prefrontal.
Fue Einstein quien dijo que el cerebro seguía siendo el gran misterio de la humanidad: ¿por qué un pensamiento, algo inmaterial, provoca efectos físicos en el cuerpo: ponerse colorado, tener una erección? Era inevitable que en la sociedad del entretenimiento el misterio del cerebro se convirtiera en espectáculo. No hace mucho salió la noticia de que un experimento con ratones abría la posibilidad de aumentar la inteligencia de los humanos mediante manipulación genética. La revista Nature Neuroscience tuvo que aclarar que ésa era una conclusión exagerada. Ahora, esa misma revista da cuenta de otro experimento del que se deduciría que el cerebro de las personas de derechas funciona de manera diferente que el de las de izquierda. Así lo demostraría la mayor actividad neuronal en el córtex cingulado anterior que registra el encefalograma de las personas de izquierda ante situaciones de cambio.
De un exceso de apelaciones al contexto social para justificar cualquier comportamiento hemos pasado a un exagerado acento en el fundamento neurológico de las decisiones. También parece haber un cambio en la percepción a traves del lenguaje de la idea de izquierda, que se ha distanciado de la connotación sombría, siniestra, de la expresión latina. Y ha perdido fuerza la contraposición derecha-izquierda como dentro-fuera.
Queda por resolver el enigma de por qué siendo así que la mayoría de los humanos, incluyendo los futbolistas, son diestros, salen más extremos izquierda que extremos derecha
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