martes, 14 de agosto de 2007

ESTO NO VENDE


El 13 de Junio de este año, publique como carta al director el siguiente escrito en casi todos los medios de comunicación escritos catalanes, foros de Internet ,así como también remití notas informativas a la casi totalidad de emisoras de Radio y Televisión locales, comarcales y nacionales.


En aquellos momentos no intentaba ni dar lastima ni compasión a nadie, el único motivo que me impulsó a ello, fue recoger un poco de apoyo por parte de colectivos en situaciones parecidas fueran hombres separados, afectados de enfermedades incapacitantes en situación similar ò simplemente personas con un poco de sensibilidad y sentido común.

Ni que decir tiene que el respaldo esperado fue escaso y en círculos muy íntimos de amistad.

Desde entonces, la enfermedad sigue su curso y se me ha concedido oficialmente la invalidez absoluta para todo tipo de trabajo, me muevo en silla de ruedas siempre que me vea con fuerza de subir los escalones para acceder al primer piso, de lo contrario a pesar de la buena disposición de mi hijo en bajar la silla y acompañarme a donde sea necesario, si las piernas dicen que no bajan, es difícil que cambien de parecer para subir.

En el Juicio de separación, la letrada de la parte contraria, pidió que si se me llegaba a conceder una incapacidad, se le aumentase la pensión compensatoria, ¡inaudito, pero cierto!

Así sigo a la espera de una resolución judicial que me permita solucionar por una parte mis ya insostenibles cargas económicas y por otra encontrar una salida a mis problemas de movilidad.

Seguramente si en lugar de ser un hombre el afectado, hubiera sido una mujer la que se encontrase en mi lugar, habría tenido mucho más apoyo y respaldo social, también la respuesta de los medios de comunicación hubieran sido diferentes.

En una época donde se criminaliza a los hombres en sus relaciones de pareja, en muchos casos con razón, quiero dejar constancia que aunque no salgamos en los periódicos, ni seamos noticia de telediarios, también hay hombres en situaciones muy precarias y mujeres riéndose de la
justicia, de los medios de comunicación y de la sociedad en general con total impunidad.

Mientras espero una resolución judicial justa, me veo amenazado de un posible recurso por parte de la esposa, que al tener abogado de oficio, otra forma de reirse en este caso del colegio de abogados, no le importará dilatar de forma premeditada y en todo lo posible la sentencia definitiva, táctica empleada en la separación y en la última vista de mediados de junio y que hasta septiembre no se dictará sentencia como mínimo.
Esto que no interesa a los medios de comunicación convencionales, permítanme que lo denuncie desde este modesto Blog , tambien hay mujeres que sin derramar ni una gota de sangre, llegan hacer mas daño que una puñalada trapera.


Pero claro, ESTO NO VENDE…………


Carta escrita a los medios unos dias antes del juicio.

Carles esta separado y en trámites de divorcio, vive en Barcelona, donde hace un año le diagnosticaron una terrible enfermedad, esclerosis múltiple en su forma primaria progresiva y todo lo que conlleva de otros episodios clínicos asociados, como una profunda depresión y diversos problemas del metabolismo.
La esposa pidió hace cinco años la separación del matrimonio, por lo que el esposo, entonces sin ninguna enfermedad diagnosticada, tuvo que abandonar por decisión judicial el domicilio que ambos comparten en propiedad, junto con la obligación de pasar una pensión mensual compensatoria a la esposa.
El esposo vive con un hijo de 22 años, que se encarga de sus cuidados y ayuda, en una vivienda de alquiler donde con muchos esfuerzos realizan una vida lo más independiente posible, ya que la vivienda se encuentra situada en una primera planta de un inmueble antiguo sin ascensor, con una escalera de difícil acceso y una distribución interior sin ninguna accesibilidad.
Aquejado de graves problemas de movilidad en estos momento y ante las dificultades de encontrar un piso de alquiler que se pueda adaptar y hacerlo accesible para las personas con problemas de minusvalía, reclama el uso de la vivienda del matrimonio que la esposa usa en exclusiva desde la separación y que sería de fácil adaptación a la actual situación de invalidez en que se encuentra, pudiendo el hijo realizar su propia vida, sin que la salud del padre hipoteque su futuro.
La esposa, auxiliar de clínica, se niega a dicha solicitud y sigue demandando el disfrute de la vivienda en exclusiva para su uso, en perjuicio del derecho de su ex-marido a tener una vida digna, donde pueda disfrutar de todos los derechos a una vida independiente, como le garantiza la últimamente aprobada Ley de Dependencia.
El desenlace de esta clara vulneración de los derechos de una persona con discapacidad se dilucida mañana jueves día 14 en el juzgado de Badalona .Que la suerte le acompañe.